Jose Antonio Aznar, Crisanto Galán, Porsche 911, Rasante de Posadas, Rallye sierra morena

Jose Antonio Aznar y Crisanto Galán volando en el rasante de Posadas. Rallye Sierra Morena 2014. Nikon D700 + Nikkor 70-200 VR2. Datos de la toma: ISO 200, velocidad 1/800 seg. f/8,0

Un rallyestrastornado andaluz que se precie identificará con claridad todos y cada uno de los elementos que aparecen en la foto, ¿verdad? Por tanto, esta imagen podemos decir que forma parte de la serie Mitología andaluza. Ver volar al Porche 911 de Jose Antonio Aznar y Crisanto Galán en el rasante de Posadas en el Rallye Sierra Morena de 2014 son de esas fotos que todos queremos hacer. Esta extraña pareja formada por uno de Cuevas de Almanzora y otro de Villaviciosa de Córdoba llevan, si mis cuentas no me fallan, 10 años juntos. Desde entonces se han proclamado Campeones de Andalucía de rallyes por 8 veces. A Excepción del 2020 que no se pudo disputar el campeonato por la Covid-19,  llevan desde el 2013 dando con el mazo. Sus registros serán muy difíciles de superar.

Volviendo a la foto y la historia para hacerla, que no fue nada fácil por cierto, os cuento un poco como la hice: eran las 4 de la tarde en el mes de mayo, así que la luz era bastante dura y poco agradecida, lo que hace que las sombras queden muy contrastadas y la luna delantera casi no deja ver nada del interior del coche. La dirección en la que se hizo este tramo es desde Villaviciosa hacia Posadas. En este sentido, los sitios para ponerse son muy peligrosos. Había un sitio muy chulo unos 15-20 metros más abajo, pero ya sabemos que estos canastos a la velocidad que van cuando aterrizan después de una volada lo que puede pasar a partir de ahí es imprevisible y muy peligroso. Al final me decidí por un pequeño repecho, que aunque estaba demasiado cerca del salto y en un plano demasiado alto para mi gusto, al menos entendía que era mas seguro, Tenía también unos buenos árboles delante. Además, para ponerlo todo más difícil, estaba rodeado  de unas zarzas con las que me estaba pinchando todo el rato. Entre ellas acoplé el objetivo y sin poder moverme ni un milímetro hice las fotos. Y ahí me pegué una hora y media, pegándome además el sol en el cogote. Terminé «guarnío» de apretar con los dedos de los pies sobre la inclinación del repecho. Me pegué unos cuantos días con agujetas y con dolor en las uñas de los pies de apretar.

Hoy día, de volver a este sitio para hacer fotos, las haría donde me gustó en un principio, unos metros más abajo en las que el coche lo ves volando de frente y la sensación del salto es mayor, pero las haría en remoto. Pondría la cámara en un trípode con un punto de vista bajo -muy cerca del suelo-  y el menda  desde un lugar seguro, con un disparador, haría la foto.

¿Cómo va a ser lo mismo hacer la foto sufriendo un infierno que hacerla sentadito en una sillita del decathlon a la sombra junto a una neverita para abrevar y condumiar sin prisa…..?

…. si es que no hay color.